Washington, 24 ene (Prensa Latina) La gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, dará la respuesta oficial del Partido Demócrata al discurso del Estado de la Unión que pronunciará el 4 de febrero el presidente norteamericano, Donald Trump, informó hoy la fuerza azul.
La titular de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el líder de la minoría en el Senado, Charles Schumer, también comunicaron este viernes que la representante por Texas Verónica Escobar será la encargada de emitir la versión en español de esa respuesta.
Al explicar la decisión de escoger a Whitmer para esta responsabilidad, Pelosi resaltó en un comunicado que es una líder con visión de futuro centrada en solucionar problemas de los habitantes de Michigan, y que está calificada de manera única para transmitir el mensaje de progreso de los demócratas a todos los estadounidenses.
Ya sea que se comprometa a «reparar los malditos caminos» o que invierta en soluciones climáticas, la visión de la gobernadora Whitmer para el futuro es exactamente lo que este país necesita, y estoy encantado de que dé la respuesta demócrata, apuntó Schumer.
Por segundo año consecutivo el liderazgo de la formación azul en el Congreso selecciona a alguien radicado fuera de Washington D.C. para responder al tradicional discurso del Estado de la Unión, en el cual los mandatarios hacen un balance de su administración, defienden prioridades legislativas y promueven políticas.
En 2019, la respuesta oficial fue pronunciada por Stacey Abrams, exlíder demócrata de la Asamblea General de Georgia y quien ganó gran relevancia nacional con la campaña que desplegó en 2018 para convertirse en gobernadora de ese territorio, donde fue derrotada por un estrecho margen.
La elección ahora de Whitmer para asumir esa responsabilidad tiene también una importancia adicional porque Michigan es uno de los estados consideraros pendulares (que puede inclinarse por el candidato de cualquiera de los dos partidos) de cara a los comicios presidenciales de noviembre venidero.
El pasado 20 de diciembre Pelosi invitó a Trump a pronunciar el discurso del Estado de la Unión en una sesión conjunta de las dos cámaras del Congreso, y ese mismo día la Casa Blanca difundió que el mandatario había aceptado.
A diferencia de sus alocuciones de ese tipo en 2018 y 2019, la del 4 de febrero despertará una atención adicional, porque debe producirse poco después de que concluya en el Senado el juicio político iniciado desde el pasado martes contra el jefe de la Casa Blanca.
Trump fue acusado por los demócratas de la Cámara de Representantes de abuso de poder y obstrucción al Congreso debido a sus llamados a que Ucrania abriera dos investigaciones que lo habrían favorecido en los comicios próximos, pero se espera que la mayoría republicana de la Cámara Alta lo absuelva.